08 abril 2006

La cama en llamas.

En ocasiones, la cama se convierte en la única fortaleza, algo así como una especie de limbo terrenal fuera de las redes de lo moral. Eso dice Euchrid cuando no se quiere levantar. Sin embargo no se trata de una evasión, sino más bien de una maceración o sedimentación de los tormentos o molestias varias y más o menos importantes. Se suspenden. Se maduran. Se lloran o se ríen, pero de otro modo. Los portazos suenan distintos desde la cama. No se oyen con los oídos sino con el estómago. Las lágrimas brillan menos desde la cama, tu voz suena como apagada y tengo un dolor sordo en el estómago, leve pero constante, casi minimalista.

3 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Tu tan pálido... y ¿sábanas verdes?

3:30 p. m.  
Blogger Euchrid said...

Tampoco estoy tan palido... pero lo cierto es q llevaba unos cuantos gin-tonics en el cuerpo cuando me hice la foto, jeje!

3:39 p. m.  
Blogger Euchrid said...

Las sábanas son un regalo de la Sra. Mitxura.

3:40 p. m.  

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